El vino…. ¡ Qué tema tan apasionante y animado, propio de la cultura francesa !
Los clichés representan a menudo al francés con una boina, una baguette de pan y una copa de vino. Bueno, eso no es del todo falso (aunque un poco para la boina…)! El pan y el vino son lo que hacen famosa a Francia, y la felicidad de sus habitantes!
El vino en Francia
Reconocido como patrimonio de la cultura francesa, el vino es un verdadero arte de vivir e incluso un pretexto para las visitas regionales, como lo demuestran las numerosas rutas turísticas del vino que se encuentran en Francia. Además, según un estudio del IFOP, el 88% de los franceses compran vino para acompañar una comida, y el 73% habla regularmente de ello con sus amigos y familiares (frente al 43% del fútbol).
Sinónimo de compartir, el vino a menudo está presente en las mesas durante las comidas con la familia o los amigos. Aporta bienestar, amabilidad y refuerza la sensación de autenticidad. Porque sí, los franceses están orgullosos de su patrimonio vinícola! Anclado en la vida cotidiana, el vino es incluso recomendable, con moderación, para reducir los riesgos cardiovasculares y el colesterol malo.
El tiempo en que los franceses ya no beberán vino está lejos de haber terminado!
Marca la diferencia
Además, si te gusta descubrir néctares nuevos, o si simplemente quieres impresionar a tus amigos durante una cena, aquí tienes una pequeña guía para disfrutar de una copa de vino blanco, tinto o rosado.
No te apresures a probarlo! Mira en su lugar y aprecia el color, es decir, el color del vino, para detectar su concentración. Para el blanco, un color con tonos verdes indica un vino joven, plata un vino de uno a dos años, oro para los vinos de dos a tres años y bronce para los vinos más viejos.
Para el rojo, el truco es inclinar el vaso delante de una hoja de papel blanco. Los reflejos evolucionan de cereza o frambuesa a teja.
Ahora es el momento de la nariz, porque es un proceso de dos pasos. Huele el vino sin mover la copa. Si no sientes casi nada, es una buena señal. Esto ayuda a identificar olores parásitos como el corcho. Ventile el néctar (revuélvalo un poco): ¡se dará cuenta de que los aromas están mucho más presentes! Depende de usted tratar de adivinar de qué está hecho su vino.
Por fin, este es el momento que todos han estado esperando: ¡la degustación! Se divide en tres etapas:
Tome un pequeño sorbo con una pequeña cantidad de aire, y disfrute por unos segundos de los aromas que se revelan. Dependiendo de cómo te sientas, el ataque puede ser agresivo, rústico, elegante, redondo o incluso suave.
Se estudia la evolución del vino en boca, su longitud. Descubrimos más sobre taninos, acidez y aromas.
Este último paso es simplemente la última impresión que usted tiene antes de tragar (o escupir) su vino.
Cata de vinos a un paso del camping
Si te ha gustado este breve curso, ¡es hora de ponerlo en práctica! ¿Lo sabías? Antes de ser un camping, Domaine La Yole era exclusivamente un productor de vino desde 1771. A pocos metros del camping, descubra la Bodega Caveau, poseedora de un saber hacer que ya no se puede probar, descubrirá una gran elección para acompañar sus comidas.
Blanco, tinto, rosado o moscatel, inevitablemente encontrará un vino que se adapte a sus deseos y a su presupuesto. Porque además de degustar vino de calidad, usted no hará grandes diferencias en sus gastos de vacaciones, ya que los vinos ofrecidos en
Caveau Winery y
P'tite Cave Cave son muy asequibles!
Sus comidas serán aún más deliciosas!
